Jamás está conmigo si no es en la cama

Entré a esta página sin imaginar poder contar lo que he vivido en estos últimos tres años. Tal vez uno piense que jamás ha vivido algo tan triste, pero leyendo me doy cuenta que todo en esta vida son experiencias.
Mi historia comienza en mi trabajo. Actualmente tengo 24 años, a punto ya de cumplirlos y me siento muy decepcionada de mí como mujer. Me enamoré de una persona casada. No me considero la otra porque nunca exijo nada, ni siquiera tiempo, pero di mas de lo que uno puede esperar.
La persona con la que ando sólo me busca por dos cosas: el dinero y sexo. Así es, lo sé y aún continúo con esta relación y si tu pregunta es qué tonta soy, lo reconozco, pero la verdad nunca me había sentido querida. Tal vez sea sólo en la cama y en hoteles porque no hay nada más que una relación de amor.

Hoy mi cabeza está en otras expectativas y me doy cuenta qué es lo que realmente quiero, y me siento sola. Tal vez esa sea la respuesta a seguir con una persona que hace daño. Él fue mi primera vez en todo, en mentiras a la familia, a dejar todo y en hacer el amor, pero necesito alguien que me diga “Gracias por estar a mi lado, gracias por entenderme”.

No conozco el amor, espero tener la oportunidad de conocer a una buena persona y tener el valor de afrontar la vida si mi destino es estar sola. Él no me habla. Yo siempre lo busco, pero jamás está conmigo si no es en la cama.

(Anónimo)